Después de las modificaciones en la Ley de Residuos, las personas físicas no pueden comprar residuos peligrosos de metales ferrosos y no ferrosos, que son un objeto de los ataques más frecuentes – elementos ferroviarios y cables.
Las actividades con residuos de metales ferrosos y no ferrosos se llevarán a cabo solamente en áreas sobre territorios definidos por planes generales de ordenación para actividades de producción y almacenamiento, puertos y sitios de la infraestructura ferroviaria con un propósito comercial.